Dentro de la continua labor de revisión y conservación preventiva llevada a cabo en la Catedral de Sevilla sobre el conjunto de su patrimonio histórico artístico, van a comenzar los trabajos de restauración integral sobre el retablo del Niño Mudo ubicado en el trascoro.
Este pequeño retablo barroco del segundo tercio del siglo XVII se aloja en un arco gótico realizado por Maese Carlín (S. XV) y decorado posteriormente, en 1733, por Matías de Figueroa y Diego Castillejo. Acoge una talla de Niño Jesús, conocido como “El Niño Mudo”, y tradicionalmente adscrito al círculo de Martínez Montañés.
Esta intervención tiene previsto un tiempo de ejecución de 3 meses, correspondiendo a la restauración integral de la escultura principal y a la limpieza y tratamiento de conservación del retablo.